
Apreciación Artística
Envuelta en el suave resplandor de una luna creciente, esta obra captura una serena escena nocturna de un pueblo tradicional japonés a la orilla del río. Las siluetas arquitectónicas se erigen solemnes contra un cielo azul que se oscurece gradualmente, con ventanas y faroles suavemente iluminados que irradian calor en medio del frío nocturno. El agua quieta en primer plano refleja estas luces sutiles, formando cintas azul plateadas que contrastan vívidamente con las sombras profundas de los muros de piedra y el follaje denso. La simplicidad formal se equilibra con una delicada graduación tonal, evocando calma y quietud, invitando al espectador a sumergirse en la pacífica serenidad de esta escena nocturna.
En términos técnicos, esta pieza emplea el clásico estilo ukiyo-e de grabado en madera, con magistrales gradaciones de azul -conocidas como aizuri-e-, mostrando el exquisito dominio del color y la textura por parte de Kawase Hasui. La composición en capas guía la mirada desde el río tranquilo hacia las detalladas siluetas de árboles y techos, y luego hacia la tranquila luna creciente, creando un ritmo visual íntimo. Históricamente, esta impresión refleja la nostalgia de principios del siglo XX por los paisajes tradicionales de Japón en medio de la modernización. La paleta apagada y la representación poética hacen que no sea solo un documento de lugar, sino una expresión emocional lírica: silenciosa, contemplativa y profundamente reverente hacia la naturaleza y el tiempo que pasa.