
Apreciación Artística
Esta escena impactante captura el momento intenso de un juramento solemne, donde cinco hombres resueltos se mantienen unidos bajo grandes arcos de piedra, con los brazos extendidos hacia una figura central que eleva tres espadas por encima de su cabeza. La arquitectura fuerte y angular enmarca este acto poderoso de lealtad y sacrificio, creando un escenario teatral donde se entrelazan el honor y el deber. La paleta de colores está dominada por tonos terrosos con rojos llamativos que atraen la atención hacia las vestimentas de los hombres, especialmente el que sostiene las espadas, cuyo manto rojo ondea con una gravedad que impone respeto. El artista contrasta magistralmente a los vigorosos soldados inclinados hacia adelante con las mujeres abatidas y llorosas sentadas a la derecha, cuyos vestidos azul y blanco suavizan el peso emocional de la escena.