Volver a la galería

Apreciación Artística
La obra evoca una serena velada veneciana; una góndola se desliza sin esfuerzo sobre el agua, transportando figuras que son meras siluetas contra el suave resplandor de la luna. El artista utiliza la técnica de pinceladas rotas para capturar el juego de la luz en la superficie del agua, lo que produce un efecto reluciente. Los colores son predominantemente apagados, con tonos cálidos y terrosos del follaje que contrastan con los azules y grises fríos del cielo y el agua. Me transporta a un lugar donde el tiempo se ralentiza y el aire se llena de susurros silenciosos.