
Apreciación Artística
La luz del sol baña la escena, proyectando un brillo cálido sobre las figuras representadas. La composición se siente íntima, invitando al espectador a observar un momento de tranquilo reposo. Tres mujeres, representadas con las formas simplificadas características de Gauguin, son el foco. Una se reclina lánguidamente sobre una superficie, su forma se hace eco de la suave curva del horizonte visible en el fondo; está bañada en naranja. Otra está sentada, de espaldas al espectador, su forma está definida por un gran sombrero que proyecta una sombra sobre su rostro. Una tercera, vestida con una prenda rosa, está sentada en el fondo, y una cuarta mujer atiende algo en el fondo. El uso que hace el artista de grandes áreas planas de color, desprovistas de detalles excesivos, es llamativo. Los tablones de madera de la plataforma sobre la que descansan están dispuestos, guiando la mirada hacia el paisaje de fondo.